por Antonio ALBERDI
La detección de una supernova tiene de por sí algo de casual. El hecho de que además sea intensa en ondas de radio y esté lo suficientemente cerca para estudiarla con gran resolución angular, la hace todavía más particular. Es el caso de SN 1993J, una radio supernova muy intensa, muy próxima y que estalló a una distancia de 2.8 minutos de arco del núcleo de M81. Se trata de un objeto perfecto para estudiar con gran detalle su evolución temporal, tanto en su morfología y tamaño angular como en su emisión de energía (o densidad de flujo).
(Fuente: IAA: Información y Actualidad Astronómica_Instituto de Astrofísica de Andalucía_CSIC)
02 agosto 2014